Luces y Sombras de la masonería
La influencia de la masonería en el gobierno municipal fue
destacable durante toda la Segunda República. Este artículo
pretende analizar los motivos de la militancia política de los
masones y cuál fue el final de la institución en la ciudad en
aquellos días.
(Continuación de la primera entrega de este artículo)
(Continuación de la primera entrega de este artículo)
Las Logias de Ronda en la Segunda República
Como consecuencia de la escisión en la Logia Giner, a principios de 1934 había en Ronda dos logias,
la Giner con 7 miembros y la escindida Gautama, con 10 componentes.
Las actividades de las logias rondeñas siguieron su curso y ambas
prosperaron: la Giner alcanzó los 20 afiliados, mientras que la
Gautama llegó a 17. Sin embargo, las disputas entre las logias eran
frecuentes, en palabras del profesor Leandro Álvarez:
“...desde hacía más de 40 años nunca había habido en Ronda tantos masones en activo como a comienzos del 36, pero casi nunca esos masones habían estado tan fraternalmente enfrentados, enemistados y divididos”.
Las peleas entre ambas logias trascendió a la primera institución
rondeña y acabó con un grave enfrentamiento entre los dos
Venerables Maestros en la estación de tren de la ciudad. Era febrero
de 1936 y la herida se hacía patente a los ojos de todos los
rondeños. Aquella ruptura no era sino el reflejo de la profunda
descomposición de la convivencia que ya vivía toda la sociedad
rondeña y la española en general.
Se aproximaban nubarrones para los hermanos masones cualquiera que
fuera su ideología política. La iglesia católica había emprendido
una nueva cruzada inquisitorial y negaba la comunión a cualquier
masón, situándolo en la herejía. Por su parte, la extrema derecha,
jaleada por la prensa afín, señaló a la masonería como la
causante de todos los males patrios y la acusaba de estar detrás de
la perdida de las colonias y de la “bolchevización” de España.
En vísperas de la entrada en la ciudad de la tropas sublevadas
comandadas por el golpista Varela, dos masones se encontraron y
hablaron muy preocupados por la situación. Uno le dijo al otro que
se iba a marchar de Ronda con la familia, que no se fiaba; el otro le
respondió que él pensaba quedarse puesto que nada tenía que temer,
ya que no tenía pistola y no había hecho mal a nadie.
Se salvó el que se marchó. Fernando Ramirez Jiménez, empleado de
la fábrica de la luz y de nombre simbólico Edisson en la Logia
Gautama, fue fusilado en Septiembre del 36. Alguien se apresuró a
señalarlo como masón, no hicieron falta más pruebas, no le dio
tiempo ni a repetir sus argumentos. El empleado del Ayuntamiento
Antonio López del Río tuvo más suerte y nada más regresar a Ronda desde Elda, fue
detenido y encarcelado en la prisión central de Burgos durante
largos años, acusado de ser masón por el Tribunal para la Represión
de la Masonería y el Comunismo, con el agravante de haber sido
secretario de la Logía Gautama. Idéntico calvario sufrieron
conocidos masones de Ronda y la Serranía: Francisco Becerra Coca,
Juan Núñez Villalta, Miguel Rodríguez García, Manuel Melgar del Valle (Triángulo masónico Renacer de Benaoján), etc.
Otros masones rondeños morían días más tarde a manos del bando
franquista, unos en Málaga como Manuel Ríos Mosquera, Venerable Maestro
de la Logia Giner y un querido médico de Arriate y Ronda la Vieja. O como Francisco
Cruz Sánchez, alcalde de la ciudad que había sido masón antes del
golpe de estado, y Santiago Trujillo Rodríguez, brigada de carabineros.
Y aún hubo otros masones forzados a huir y que no volvieron ya más
a Ronda. Fue el caso, por ejemplo de Miguel Rengel Reina o de Eduardo de
Hoyos Domingo, exiliados en Méjico.
Una reflexión personal y un intento de reparación.
Trágico final para los que soñaron con la libertad como máximo
exponente de la condición humana. Sirvan estas líneas para tratar
de recuperar su memoria:
No, los masones no eran demonios con cuernos y largo rabo. Fueron idealistas que pudieron equivocarse en sus deseos de mejorar la vida pública, pero no merecieron, en modo alguno, el escarnio ni la fatalidad a los que los condenó Franco durante sus 40 años de dictadura.
Yo creo que fueron fusilado mas que por sus ideales utópicos por sus ideas de izquierda, contra la que se luchaba para no caer en las manos de Rusia
ResponderEliminarYo creo que fueron fusilado mas que por sus ideales utópicos por sus ideas de izquierda, contra la que se luchaba para no caer en las manos de Rusia
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
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ResponderEliminarHola Paz, algo se ha perdido en este comentario. Exiliado, ¿quién? Por favor, ¿a qué te refieres?
EliminarSaludos!
Francisco becerra Coca era mi bisabuelo y fue masonico en la orden de Giner de los Ríos en el 31,y luego en Cartagena pasó a ser Socrates. Fue perseguido y condenado pero no capturado, huyó a Casablanca en el 41 y ali murió de mayor.
EliminarPaz, estos son los datos que recopila el profesor Leandro Álvarez Rey en el artículo "Republicanos y masones en la provincia de Málaga (1925-1936)" sobre tu bisabuelo:
EliminarBECERRA COCA, Francisco: Militar retirado. Residente en Ronda (Málaga). Nombre
simbólico «Sócrates», grado 1.o. Fue iniciado en 1931 en la Logia Giner n.o 19, causando baja poco después y reingresando como afiliado el 7 de octubre de 1934. En diciembre de 1935 fue expulsado de la Logia Giner (irradiado). Al parecer también perteneció al cuadro de la Logia Hijos de Hércules, de Ceuta. El 20 de febrero de 1945 fue condenado por el Tribunal Especial para la Represión de la Masonería y el Comunismo a 12 años y un día de reclusión mayor. (CDMH, Masonería, serie B, C. 214, Exp. 22).
El golpista, asesino, criminal... Ya dio muestra de su maquiavélica personalidad cuando en Marruecos mando fusilar ante sus compañeros a un soldado que no le gusto el rancho, así se las gastaba...permitaseme...Paca "la Culona" ...Uno de los mayores genocida que ha dado nuestra España.
ResponderEliminarMi abuelo Miguel Gallero también era Mason y trabajaba en la fábrica de la luz.. Fue fusilado..
ResponderEliminarEl profesor de la Universidad de Sevilla, Leandro López Rey, publica estos datos acerca de tu abuelo en su libro: "Republicanos y masones en la provincia de Málaga (1925-1936)".
EliminarGALLEGO VERA, Miguel: Electricista. Residente en Ronda (Málaga). Nombre simbólico
«Voltaire», grado 2. Fue iniciado en septiembre 1925 en la Logia Giner 19, desempeñando el puesto de Limosnero en el cuadro de Luces y Dignidades de este Taller para 1926. Posteriormente perteneció al Triángulo Democracia, también de Ronda, en el que figuró como afiliado desde enero de 1927. Fue exaltado al grado 2 en abril 1927, desempeñando el cargo de Secretario del Triángulo, aunque causó baja por falta de asistencia y pago en noviembre de 1927.
Mi bisabuelo era Antonio López del Río, el que se fue a Elda con su familia, sé que allí aprendió el oficio de zapatero. Tienes más datos. Muchisimas gracias.
ResponderEliminarTu abuelo tuvo un recorrido similar al de mi abuelo Eduardo de Hoyos. Ahí tienes los datos, la fuente es la misma, el libro de Leandro López Rey:
EliminarLÓPEZ DEL RÍO, Antonio: Empleado. Residente en Ronda (Málaga) y domiciliado en la
calle Infantes nº 1. Nombre simbólico «Heliófilo», grado 3º. Fue iniciado en julio de 1933 en la Logia Giner n.o 19, ingresando como afiliado en marzo de 1934 en la Gautama nº 64. En este Taller fue exaltado al grado 2º en julio de 1934 y al grado 3º de maestro masón en junio de 1935, desempeñando el cargo de Secretario Guarda Sellos de este Taller en 1935 y 1936. En mayo de 1934 en su domicilio radicaba la dirección postal de la Logia Gautama. En 1936 pertenecía como afiliado al partido de Izquierda Republicana. (CDMH, Masonería, serie A, C. 189, Exp. 14).
Si quieres alguna aclaración, envíame un correo. Chao!
Muchas gracias!😊🙏
ResponderEliminarEs horrible lo que pasaron nuestros familiares en esos años,estemos alerta para que nunca más se vuelva a manchar de sangre la libertad de pensamiento
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